En el universo del marketing digital, hay dos conceptos que suelen usarse como sinónimos, pero que en realidad cumplen roles muy distintos: AdTech y DSP (Demand-Side Platform). Entender sus diferencias no es solo una cuestión técnica. Es fundamental para diseñar campañas más sólidas, eficientes y alineadas con el negocio.
¿Qué es una AdTech?
AdTech es un ecosistema completo de tecnologías. Incluye todas las herramientas necesarias para planificar, activar, medir y optimizar campañas digitales desde una mirada integral. Dentro de una AdTech podemos encontrar:
• Sistemas de gestión de datos: CDPs (Customer Data Platforms), DMPs (Data Management Platforms).
• Plataformas de automatización de medios y creatividades.
• Soluciones de análisis de audiencias, atribución multicanal y reporting.
• Infraestructura para orquestar campañas en tiempo real.
¿Qué es un DSP?
El DSP es uno de los componentes clave dentro del stack AdTech. Es la plataforma encargada de ejecutar la compra programática de medios. Permite acceder a inventario en tiempo real en múltiples exchanges, sitios y apps. Un DSP:
• Conecta audiencias con espacios publicitarios.
• Gestiona pujas y presupuestos automatizados.
• Optimiza la entrega según parámetros definidos por la estrategia.
¿Cómo se complementan?
Pensalo así: si la AdTech es el cerebro de la operación, el DSP es el brazo táctico. Mientras la AdTech orquesta toda la estrategia (datos, canales, atribución), el DSP ejecuta una parte vital: la activación.
En Revfy trabajamos con ambos niveles de forma integrada. No necesitamos soluciones desconectadas ni herramientas parciales. Todo se gestiona desde un solo entorno, lo que nos permite:
• Reducir el tiempo de activación.
• Ajustar estrategias en tiempo real, sin intermediarios.
• Usar datos propios directamente en la segmentación.
• Medir de punta a punta sin fragmentar la experiencia.
En un ecosistema donde cada impresión puede costar o convertir, tener una infraestructura AdTech bien conectada con el DSP ya no es un lujo. Es una necesidad.
